Es la señal de mi fe; muestra quién soy y lo que creo.
Es el resumen del Credo.
Es la señal de mi agradecimiento.
Tengo que hacer con amor y emoción este gesto que me recuerda que Jesús ha muerto por mí.
Es la señal de mi intención de obrar, no para la tierra, sino para el Cielo.
Al hacerla, y pronunciando estas misteriosas palabras:
"EN EL NOMBRE DEL PADRE Y DEL HIJO Y DEL ESPÍRITU SANTO", me comprometo a obrar:
• En el nombre del Padre que me ha creado.
• En el nombre del Hijo que me ha redimido.
• En el nombre del Espíritu Santo que me santifica.
En una palabra: A actuar como hijo o hija de Dios.
Este signo es la señal de la consagración de toda mi persona.
Al tocar mi frente: Rezo a Dios todos mis pensamientos.
Al tocar mi pecho: Consagro a Dios todos los sentimientos de mi corazón.
Al tocar mi hombro izquierdo: Le ofrezco todas mis penas y preocupaciones.
Al tocar mi hombro derecho: Le consagro mis acciones.
La señal de la Cruz es en sí misma fuente de grandes gracias.
Debo considerarla como la mejor preparación a la oración, pero en sí misma ya es una oración, y de las más impresionantes.
Es una bendición.
Si me emociona ser bendecido por el Papa, por un obispo... ¡Cuánto más ser bendecido por el mismo Dios!
Señor, concédeme la gracia de hacer de mi señal de la cruz un "Heme aquí" motivador para la oración, para la acción, para mi día entero; así como una poderosa llamada de las bendiciones del cielo sobre mí.
Ciao.
4 comentarios:
Pues muy buena tu iniciativa cariño. Aveces no sabemos ni por qué hacemos las cosas. Me recuerda un alumno que al verme la cruz de madera en el pecho pensó que era para espantar vampiros jajaja. Le dije, no, esta cruz representa a los que misionamos y si no tiene imagen de cristo es porque he de ser yo el cristo que muera aquí para dar vida a los demás. Con eso quedo no sé si mejor pero por lo menos ya sabe que no es para esperar a drácula. Un abrazo fraternal.
Realmente siempre se aprende algo en tu blog...a veces, es que ni pienso las cosas.
De todo, lo que más me ha gustado es que "es un resumen del Credo"
Recuerdo mi "Credo"...y realmente, si no hubiera tenido la cruz ahí, para sostenerme, no sé si hubiera podido profesarlo...
Me acordaré cuando lo haga y cuando lo rece.
Buena explicación...A mi me la explicaron los claretianos en Loja.
¡Qué recuerdos!
Un abrazo
Ciao
-A ver si nos vemos-
La verdad es, que la mayoría de las veces, vemos los signos y no nos paramos a pensar lo que pueden significar o porqué se hacen, y en la mayoría de las veces ni investigamos o preguntamos para conocerlo.
No podemos saberlo todo y además creo yo, que la Iglesia no se ha encargado de enseñanóslo.
Cuando hice Teología, aprendí cosas que no podía ni imaginar y me dí cuenta de mi ignorancia en muchos aspectos de la religión que profesaba.
Yo pienso que si nos enseñaran cosas tan simples como esta, seguramente, seríamos menos autómatas a la hora de participar en cualquier celebración de la Iglesia.
Besitos, laura, cris y javi, y gracias por vuestros comentarios.
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