Plegaria por los niños

Hoy quiero pedir, por los niños que dejan sus dedos llenos de chocolate en todo lo que tocan, que saltan en los charcos y estropean sus pantalones nuevos, que comen dulces antes de la comida y que nunca encuentran sus zapatos por la mañana...

Hoy quiero pedir, por los niños que miran a los fotógrafos desde atrás de los alambres de púas, que nunca han caminado por la calle con un par de zapatos nuevos,que no han ido jamás al colegio, que nunca han jugado ni disfrutado y que han nacido en lugares a donde nosotros jamás nos acercaríamos y que es donde probablemente morirán...

Hoy quiero pedir, por los niños que nos dan besos pringados de caramelo y ramos de flores silvestres del campo, que duermen con su perro y que nos abrazan muy fuerte, aún haciéndonos daño ... que manchan con la pasta de dientes todo el baño, que observan con ojos asombrados a su padre cuando se afeita y a su madre mientras se maquilla, que hacen ruido cuando se toman la sopa...

Y también quiero pedir por los niños que nunca han comido un postre, que no tienen su cobija favorita que llevar a todos lados, que ven a sus padres sufrir, que se acercan a nuestros coches en cada calle pidiendo una monedita o un bocadillo con sus ojos, que no tienen baños para asearse, y cuyas fotos aparecen en las estaciones de policía y no en las oficinas y en las casas de sus padres...

Quiero pedir por los niños cuyas pesadillas suceden a plena luz del día, que comen lo que encuentran, que duermen bajo el cielo abrigados por periódicos, que nunca han ido al dentista, que no reciben mimos de nadie, que van a dormir hambrientos y despiertan hambrientos, que no tienen dirección ni rumbo a donde dirigirse...

Quiero pedir por los niños a quienes les gusta que los carguen y por aquellos que tienen que ir cargados, por los que se dan por vencidos y por los que siguen luchando, por los que no encuentran una mano que agarrar y sí una mano que ofrecer... por todos los hijos del mundo... para que DIOS los bendiga con amor y alegría...

Y pido también por los que no los dejan nacer, para que Dios premie con la gloria eterna su inocencia y su desgracia...

Cada niño, al nacer, nos trae la dicha de saber que Dios, aún no ha perdido la esperanza en los hombres.

Ciao.