Ayer editaba las fotos de la Velada que en Jaén hicimos el pasado día 5 de julio.
Hoy os dejo una reflexión que he hecho para que sea publicada en la página de la Diócesis de Jaén.
Es una reflexión desde la tranquilidad de la casa, después de haber asimilado lo que allí vivimos, y como agradecimiento a mis paisanos por la compañía que nos dieron.
Esta es mi valoración, y aquí os la dejo:
DE NUEVO, OBJETIVO CUMPLIDO:
Sabíamos que era un reto complicado: Reunir a nuestros paisanos de Jaén, para rezar y encender UNA VELA POR LA VIDA DE LOS INOCENTES ABORTADOS.
No era fácil, porque en Jaén, un 5 de Julio y con 39 grados a las 21,30 de la noche, es difícil salir a la calle.
Nuestros paisanos, ya se han ido afuera de Jaén, buscando un poco de fresco, que les alivie las noches tan calurosas que estamos padeciendo, pero igual que el 7 de marzo, dónde el agua nos cayó a raudales, y estuvieron con nosotros, el lunes, con un calor sofocante, también estuvieron allí, apoyándonos con su presencia. ¡Mil gracias!
Mil gracias por vuestra compañia, mil gracias por vuestra valentía y mil gracias, porque una vez nos habéis demostrado, que los volountarios de Derecho a Vivir Jaén, no estamos solos.
El 5 de julio, fué un día triste para los que luchamos y gritamos por la cultura de la vida.
La nueva Ley del Aborto, abre las puertas a médicos sin escrúpulos y a las mujeres, que por cualquier motivo, quiera desprenderse del ser que lleva engendrado en su seno.
Este gobierno, abre las puertas, para que cada ser vivo que sea engendrado, pueda nacer o no, sin contar con sus derechos como ser humano.
Esta ley asesina, abre la puerta a la depravación, a la falta de conciencia del colectivo médico, que a cambio de unos euros, es capaz de ir segando las vidas de los inocentes, faltando al código deontológico que un día juraron.
Nosotros, sin embargo, gritamos ¡SÍ A LA VIDA! y por eso nos reunimos el lunes, porque para nosotros CADA VIDA SÍ IMPORTA.
Nuestros corazones estaban con todos esos inocentes que ya han muerto, y con todos los que con esta nueva Ley, están por morir.
Como en cada concentración que hemos convocado, hoy me toca hacer balance:
¿Cuántos fuimos? En este mundo en que las cifras cuentan tanto para todo, a nosotros no nos importan.
¿200? ¿Tal vez 300? Las cifras, según vimos están más o menos por ahí. Pensamos que fuímos entre 250 o 300. Pero ya os digo, que la cifra total no nos importa.
Lo importante es que, los que estuvimos allí, lo hicimos con valentía y con corazón.
Nuestro objetivo era encender UNA VELA POR LA VIDA, y hacer un gran corazón, que en él, se albergara nuestra pena y nuestro deseo de que esta Ley sea abolida.
Cada uno de los que estuvimos allí, teniamos un único deseo: Decir que nos oponemos rotundamente a esta Ley y que aunque muchos piensen que no tenemos nada más que hacer, seguiremos luchando, sin importarnos las veces que tengamos que salir a la calle a protestar y a levantar la voz, por los QUE NO TIENEN VOZ.
No nos importa el esfuerzo, el calor o el frío.
Sabemos que tenemos una misión: Luchar por la vida, y NO nos cansamos de proclamarlo.
Por eso, sigo animando a nuestros paisanos de Jaén, a que se sigan uniendo a nosotros, en cada acto que hagamos.
Sabemos que podemos contar con ellos, porque cada día somos más personas las que luchamos por la vida. Gracias.
No quería terminar esta pequeña reflexión, sin agradecer a los voluntarios de Linares y Andújar, por convocar ellos sus propias concentraciones y por el esfuerzo realizado, para que este acontecimiento, salga también de los límites de la capital.
La "TELERAÑA" DE LA VIDA, tiene que seguir extendiéndose por toda nuestra provincia, y desde la Delegación de Derecho a Vivir en Jaén, estamos dispuestos a ayudar a cualquier pueblo que esté dispuesto a crear una nueva red local.
Solo teneis que poneros en contacto con nostros en: jaen@derechoavivir.org
Contamos con vosotros.
Ciao.
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