La Estrella de Oriente

Hace unos días vivíamos la celebración de la Epifanía del Señor y la Adoración de los tres Reyes Magos de Oriente.
Ya ha pasado el bullicio de estos días festivos, en los que el Niños Dios, nos ha dado la oportunidad de celebrar con nuestros seres queridos, la alegría que para nosotros los cristianos, supone reunirnos en torno al nacimiento, para celebrar su venida.
Con la calma que da ya la vuelta a la rutina diaria después de las fiestas, y con la paz que nos da sabernos queridos por Dios, me siento a reflexionar en el Evangelio del día de Reyes.
El Evangelio de ese día nos narra como esos tres Magos llegados de Oriente, buscaban el sentido y el significado de esa estrella que les anunciaba que algo grande había ocurrido.
Ellos, sin cuetionarse nada, se ponen el camino, solamente porque sentían la necesidad de adorar y reconocer a Esa Grandeza, que sin saber lo que realmente era, ya la notaban en su interior.
Esos tres Magos, podemos ser cualquiera de nosotros. Personas que sienten la necesidad de postrarse ante Dios, para ofrecerle todo lo bueno que tenemos.
La estrella, significa esa luz que necesitamos y que Dios nos ofrece para guiarnos en cada momento de nuestra vida. Una luz que nos ilumina en los momentos de oscuridad, para darnos la claridad necesaria para afrontar el momento por el que estamos pasando.
Nosotros, nos ponemos en camino en cada momento de nuestra vida, cuando necesitamos encontrarnos con Dios, nos postramos ante Él y le damos todo lo que somos y tenemos.
La Estrella de Oriente, es la luz necesaria en los momentos de oscuridad, que nos marca el camino recto y seguro, para nuestro encuentro con Dios.
Que esa Luz sea siempre nuestra guía.

Ciao.