La MULA y el BUEY

Cada vez que el Papa dice algo, se lía la mundial, por decirlo de una forma coloquial. 
Ha sido la noticia bomba: "El portal de Belén, no estaban la mula y el buey". Todo el mundo ponía el grito en el cielo. ¡Toda la vida poniéndolos y ahora resulta que no estaban dándole calor a Jesús en su nacimiento!
Comentarios y encuestas en televisiones y radios, coparon ayer esta novedosa noticia... Casualmente encuentro en el muro de Facebook de un amigo sacerdote, el comentario del Padre Javier Leoz Ventura, que como siempre, hace un comentario teológico a las palabras del Papa en su nuevo libro.
Aquí os lo dejo, porque seguro que esta reflexión nos aclarará un poco más el verdadero sentido de las palabras del Papa.

¿Hay que suprimirlos del BELÉN? ¿Quién ha dicho eso? ¿El Papa? ¡No! ¡Por supuesto que no!
El Papa, como en otras tantas cosas, simplemente nos recuerda la centralidad de las cosas y, luego, la tradición o la piedad popular va añadiendo aquellos elementos que adornan, potencian y magnifican el Misterio de amor que es el Belén.
Quedarse en algo tan insustancial como “el buey o la mula” ante la edición del Libro de la Infancia de Jesús es no ir al fondo del mismo.
A Benedicto XVI le interesa un hecho histórico y central en nuestra fe: Dios se ha hecho hombre. 
Interpretar de otra manera las palabras de Benedicto XVI es no querer asomarse a la íntegra lectura de un libro escrito por uno de los intelectuales mayores de nuestro tiempo que, además, es Papa.
Estoy seguro, que Benedicto XVI seguirá poniendo en su belén particular el buey, la mula, los ángeles, los pastores, el molino, la lavandera y todo lo que haga falta.
Lo que está claro es que, en mi belén parroquial, procuraré no poner a tanto borrego y que con tan mala saña se queda en lo superficial sin haber leído del libro del Papa… ni una sola página.
Y es que, mientras unos hablan del buey y de la mula, otros nos preparamos para lo más importante: para colocar en el centro al REY DE REYES. ¡CRISTO! 

Cuántos de los que hoy ponen el grito en el cielo (especialmente alguna prensa escrita o televisiva) serán luego los primeros en machacarnos que, por Navidad...¡FUERA EL BELÉN! 

¡Ver para creer! ¡Poner a Dios y a mula junto con el buey al mismo nivel!

Padre Javier Leoz Ventura

Ciao.