Y el niño le preguntó:
- ¿Abuelo por qué lo bueno
siempre se hace esperar?
A lo que el anciano respondió:
- ¿Si lo bueno no se hiciera esperar,
dónde estaría la magia en la vida?
Solo es superando pruebas y obstáculos
cuando realmente somos dignos de alcanzar la cima.
Saber esperar tus tiempos Señor
Aprender de las heridas
Amar tu voluntad
Así sea, hoy y siempre.
Padre Guillermo Serra, L.C.
Ciao.
No hay comentarios:
Publicar un comentario