domingo, 17 de febrero de 2019

¿Quién me mando a meterme en esto?

Vamos a ser sinceros: A veces nos sobran motivos para abandonar aquella empresa en la que nos hemos embarcado. Que puede haber sido que, en un inicio fuera al revés: Que nos sobraran motivos para lanzarnos a ello y para creer que ahí se escondía una promesa de felicidad y plenitud que podía hacerse realidad en la propia vida.
Sin embargo ahora nos miramos al espejo, antes de empezar la jornada, antes de iniciar un conversación conflictiva (o de terminar una discusión), frente a la pila de apuntes por estudiar, de platos por lavar, de mensajes que contestar…. Y nos preguntamos ¿Quién me mando a meterme en esto?
Que muchas veces es una pregunta retórica que lanzamos al aire y sólo para quejarnos.
Pero que, quizás, podríamos animarnos a contestarnos en serio. ¿Por qué me metí en esto? ¿Quién me mandó? ¿Qué me hizo decirle que sí a esto que estoy viviendo ahora? ¿Qué sentido tiene para lo que quiero para mi vida? 
La respuesta de esto puede ser la misma que al principio. O puede ser otra. Y está bien, porque la vida cambia, el mundo cambia, nosotros cambiamos… Siempre es una incertidumbre el devenir final de estos cambios. Pero no hay que dejar de preguntarnos, para descubrir, una y otra vez, a dónde y a qué nos conduce el amor.

Ciao.

No hay comentarios: