jueves, 30 de mayo de 2019

La oración es vida


La vida es sencilla y coherente, "no fácil"; sencilla.
Cuando la oración deja de ser vida, la convertimos en una complicación fenomenal.
Ahora se pregunta por ejemplo: ¿Cómo se debe orar en nuestro tiempo?
Es una pregunta sin sentido.
Acaso se pregunta: ¿Cómo se debe amar en nuestro tiempo?
Se ama y se ora como hace cuatro mil años.
Los hechos de vida tienen su raíz en la sustancia inmutable del hombre.
Cuando se da esta situación existencial, rápidamente se desencadena una inversión de valores y se desatan teologías frívolas que se derrumban ante la primera saeta disparada desde la autenticidad y se dice: A Dios no hay que buscarlo en la soledad de la "montaña ", sino en el hombre.
No hay que buscarlo en "espíritu y en verdad", sino en el fragor de las multitudes hambrientas, no existe la salvación de mí alma, sino la liberación del hombre de la explotación y la miseria, el trabajo es oración, nunca hablan de vida eterna, del alma, de Dios, sino de explotación, de la injusticia social, etc.
Cuando se produce la crisis de Dios, se comienza a contabilizarlo todo con criterios de utilidad; y la Biblia nos recuerda que Dios está más allá de las categorías de lo útil y lo inútil.
La escritura afirma una sola cosa : "DIOS ES".
Y se eligió un pueblo cuyo destino final es proclamar a todos los pueblos y continentes que: “DIOS ES".
Cuando se produce el “vacío de Dios" por el abandono de la oración, surge la necesidad de autoafirmarse desplazándose hacia diferentes actividades y se justifica con bonitas teologías, pero en el fondo se trata de dar "sentido a la vida", de cubrir un vacío interior .
Pero los verdaderos libertadores y los grandes comprometidos en la Biblia fueron aquellos capaces de resistir la mirada de Dios en el silencio y la soledad y por cierto no un Dios de golosina sino Aquel que incómoda, desinstala y empuja por la pendiente de la paciencia y de la humildad hacia la aventura de la gran liberación.
¿Qué será de la vida del hermano en cuya alma Dios ha desfallecido?  Seguirá "hablando" de Dios, pero será incapaz de "hablar con Dios".
Los hambrientos y sedientos que se acerquen a él se van a encontrar con un manantial agotado ."

Talleres de Oración y Vida 

Ciao.

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