lunes, 14 de octubre de 2019

Seguir a Jesús


Es verdad que hay ideas que nos resultan novedosas, creativas o ingeniosas, pero no nos comprometernos con ellas hasta que nuestros afectos no entran en juego.
Un proyecto puede ser muy bueno pero mientras no nos toque a nuestros sentimientos no nos sentiremos comprometidos. Nuestra voluntad se compromete cuando hay afecto y no solo por ideas o proyectos.
Cuando vamos detrás de algo o de alguien es porque los afectos están involucrados, porque la voluntad está enamorada y porque nos interesa conseguir algo para nuestro  propio beneficio.
Cuando decidimos estar con una persona y seguirla es porque compartirnos no solo ideas o proyectos, sino sobre todo sentimientos y afectos.
Seguir a Jesús no es cuestión de que su proyecto del Reino nos resulte interesante y nos guste en principio lo que en él se nos cuenta, sino que le seguimos porque lo amamos a Él.
Solo de esta manera podremos seguirlo a pesar de las dificultades y contrariedades.

Ciao.

No hay comentarios: