¡No es una inocentada sino realidad!

¡NO ES UNA INOCENTADA SINO REALIDAD!

La vida de aquellos que, buscando a Jesús entre los pliegues de Belén de Judea, fue truncada por mandato de Herodes el Grande. 

¡CUÁNTOS HERODES GRANDES EN NUESTROS TIEMPOS!

Los que, en el aborto, ven una conquista del progreso y miran hacia otro lado defendiendo los derechos de cualquier especie.

¡CUÁNTO HERODES SUELTO!

Los que, en la eutanasia, ven un éxito cuando en realidad es un fracaso y decadencia de la conciencia y de la moral.

¡Cuántos, inocentes, cerrarán los ojos al mundo y -en su nombre- dirán que fue por las mercedes de esta fatídica ley!

¡NO ES UNA INOCENTADA SINO REALIDAD!

Los que, en vez de sembrar fraternidad y hermandad, utilizan la guadaña de la ideología más extrema para aniquilar libertades o derechos fundamentales.

¡NO ES UNA INOCENTADA SINO REALIDAD!

Los que, con el paraguas de un pensamiento único, quieren cambiar el mundo a su antojo y manera sin más referencia que el "ego" del dominante.

¡NO ES UNA INOCENTADA SINO REALIDAD!

Los que, envueltos en el manto negro del hambre, de la injusticia y el olvido, mueren en la pobreza ante la dureza de los que bailan sobre la riqueza

¡NO ES UNA INOCENTADA SINO REALIDAD!

Los que, en este tiempo de pandemia, se han marchado sin reclamación alguna por aquellos que decían quererles o, por aquellos otros, que se han sentido expertos en todo. 

¡NO ES UNA INOCENTADA SINO REALIDAD!

Los que, con desesperanza y sin alegría alguna, se encuentran en tantos corredores de la muerte, injustamente tratados y con leyes que, siendo legales, no siempre son justas ni dan en la verdad.

Día de los Santos Inocentes. Horas para recordar a tantos que mueren inocentemente como consecuencia de su fe, de sus convicciones más profundas y por querer, para este mundo nuestro, un color tamizado por la esperanza. 

¡Va por ellos!

Javier Leoz  (Párroco de San Lorenzo de Pamplona)

Ciao.