viernes, 8 de enero de 2021

¿Discernir o decidir?


En según qué ambientes es muy común usar el concepto "discernir" como sinónimo de reflexionar para decidir. 
No obstante, si lo que queremos es discernir del modo en el que Ignacio lo propuso en los Ejercicios Espirituales, no toda reflexión o decisión es discernimiento.
Benjamín González Buelta habla de ello en su libro . La novedad del Espíritu y la astucia de la carcoma. 

Según él, no discernimos:

- Cuando decimos que buscamos lo que el Espíritu nos pide, pero, en el fondo, pretendemos quedarnos como estamos, resistir en nuestras convicciones.

- Cuando solamente buscamos la voluntad de Dios en los momentos de especial complejidad o encrucijada. Siempre, especialmente en las cosas más pequeñas, Dios tiene un sueño para nosotros.

- Cuando buscamos una lista de normas, cuando queremos saber qué es correcto e incorrecto. El discernimiento puede llevarnos a una interpretación de la norma totalmente distinta a lo acostumbrado.

- Cuando no consideramos el contexto de cada persona, de cada situación. No estamos discerniendo si pretendemos abstraernos de la realidad.

- Cuando solamente pretendemos consumir experiencias. No discernimos para nosotros sino para los demás, para hacer la voluntad de Dios, aunque eso nos parezca aburrido.

- Cuando necesitamos, para hacerlo, grandes estudios o habilidades. El Padre se manifiesta con gusto a los humildes, y para hablar con él solamente es necesario hacer silencio y rezar.

Espiritualidad Ignaciana

Ciao.

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