jueves, 4 de noviembre de 2021

¡No me pidas demasiado, Señor!

NO ME PIDAS DEMASIADO, SEÑOR

Porque tengo miedo a perderte si,

en el camino vislumbro piedras y encrucijadas.

Porque, mi vida,  a veces cómoda y caprichosa

se mueve más con los impulsos 

del tic tac del mundo

que con el agua de la fe.

NO ME PIDAS DEMASIADO, SEÑOR

Porque, temo decirte que “te amo”

Cuando, tal vez, sin quererlo o sabiendo

me amo demasiado a mí mismo

alejándome de ti y de tus mandatos.

Porque, diciéndote que “te quiero”

me cuesta manifestar públicamente

que, tu camino y mi amistad contigo,

no siempre ha de estar lleno de aplausos

ni reconocido por los poderes del mundo

¡NO ME PIDAS DEMASIADO, SEÑOR!

Digo “creo en Ti” y miro hacia otro lado

Proclamo “espero en Ti” 

y me guío por otras estrellas

Grito “eres lo más grande”

y te dejo, pequeño e insignificante, con mis obras.

Como Pedro, Señor, 

yo te digo que tu eres el Hijo de Dios

El que rompe los ruidos de los cañones, con tu paz

El que resquebraja la violencia, con tu fraternidad

El que dinamita el odio, con la fuente de tu amor

Por eso, Señor, no me pidas demasiado.

Pero, ayúdame, a crecer en mi trato contigo

A descubrirte como la fuerza más poderosa

Como el Señor ante otras decenas de señores

Como lo más querido en mi vida y en mi corazón.

Amén

Padre Javier Leoz Ventura

Ciao.

 

No hay comentarios: