¿Qué nos enseña el cuarto domingo de Adviento?
El cuarto domingo de Adviento nos invita a reflexionar sobre cómo podemos seguir el ejemplo de María en nuestro camino espiritual. Su “sí” nos recuerda que el discernimiento no es sólo un proceso interior, sino también un paso hacia acciones concretas que reflejen nuestra fe y nuestros valores.
¿Qué se celebra el cuarto domingo de Adviento?
Esta coincidencia resulta en una ocasión muy especial para celebrar la fecha en la que algunos católicos encienden la cuarta y última vela de la corona de Adviento, como símbolo del final de la espera por la llegada del Señor.
¿Cuál es el mensaje para el 4º Domingo de Adviento?
El Adviento también debe inspirar esperanza mientras esperamos la Segunda Venida de Cristo. Llamamos a la Cuarta Vela la “Vela de la Paz” y nos recuerda que Jesús viene a traer Paz al mundo y a los corazones de las personas. Sin Cristo, no hay paz en este mundo.
En la cuarta semana de Adviento, encendemos la última vela morada para marcar la última semana de oración y penitencia mientras esperamos el nacimiento de nuestro Salvador. Esta última vela, la “Vela del Ángel”, simboliza la paz. Nos recuerda el mensaje de los ángeles: “Paz en la Tierra, Buena Voluntad para con los Hombres”.
Para terminar nos podemos preguntar, ¿Qué reflexión nos deja el Adviento?
En conclusión, el Adviento nos prepara para el encuentro litúrgico y espiritual con el Señor. Al mismo tiempo, nos invita a reflexionar sobre nuestro encuentro íntimo con Dios cuando, como enseña el Apóstol Pablo en la primera Carta a los Corintios, «le veremos cara a cara».
Terminamos este tiempo de Adviento y la próxima semana ya celebraremos el Nacimiento de Jesús, que llega a nosotros para darnos todo su amor, el mismo con el que tenemos que recibirlo.
Ciao.
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