Cuando vivimos la comunión no hay excedente ni escasez. Es decir, quien tiene mucho no acumula sólo para sí y quien tiene poco no sufre pobreza.
Nuestras habilidades son regalos importantes para la comunidad. Incluso cuando se nos paga, nuestras capacidades deben ser puestas a disposición con mucho amor y con el objetivo mayor de servir y no sólo para beneficio personal.
Adquirí muchos conocimientos y habilidades a lo largo de mi vida y, hoy, puedo ponerlo todo a disposición de todos.
Así como en la comunión se da y se recibe, yo sigo recibiendo muchos regalos a través de mis hermanos y hermanas.
Es muy gratificante poder amar a través de mis capacidades, ya que esto le da un nuevo significado a mi trabajo, a las diversas actividades que realizo y a mis relaciones interpersonales.
Tener una capacidad de cualquier tipo significa tener la posibilidad de amar con "calidad".
Apolonio Carvalho Nascimento
Ciao.
No hay comentarios:
Publicar un comentario