Aléjate

 

Aléjate de los oscuros, de los tibios, de los tristes, de los aburridos, de los que no sabes si vienen o van, si suben o bajan.

Aléjate de los que tienen el corazón helado, de los que no regalan ni una sonrisa con lo poco que cuesta, de los que se guardan los besos para una ocasión que quizás nunca llegue, sin saber que en la vida lo único que no se puede aplazar es el amor.

Aléjate de los que no aman con el alma abierta de par en par, de los que se esconden tras una armadura de miedo, de los que no te miran a los ojos y no saben besar con los párpados cerrados. Aléjate.

Aléjate de los listillos que se hacen los tontos, de los que creen que te chupas el dedo o que acabas de caerte de un guindo. De los que no saltan hasta estar seguros del próximo árbol, de los que te venden cuentos que ni ellos mismos se creen, de los vende humos y de los que tienen la cabeza vacía. Aléjate.

Aléjate de los que hablan en voz baja por si se tienen que tragar sus palabras, de los que prometen mucho y hacen poco, de los que juran traerte la luna, pero no son capaces de salir a buscarla. Aléjate.

Aléjate de los envidiosos, de los criticones, de los falsos y de los mentirosos. Aléjate de todo aquel que no te traiga paz. Que bastante te costó conquistar la tuya entre lágrimas y cicatrices.

J.M. Quirós (Trenzando Palabras)

Ciao.