jueves, 30 de agosto de 2007
La oración de los cinco dedos
1.- El dedo pulgar es el que está más cerca de ti. Así que comienza orando por aquellos que están más unidos a ti. Son los más fáciles de recordar. Orar por los que amamos es una "dulce tarea".
2.- El próximo dedo es el índice: Ora por los que enseñan, instruyen y curan. Ellos necesitan apoyo y sabiduría al conducir a otros por la dirección correcta. Mantenlos en tus oraciones.
3.- El siguiente dedo en el más alto. Nos recuerdan a nuestros líderes, a los gobernantes, a quienes tienen autoridad. Ellos necesitan la dirección divina.
4.- El próximo dedo es el del anillo. Sorprendentemente éste es nuestro dedo más débil. Él nos recuerda orar por los débiles, enfermos o atormentados por problemas. Ellos necesitan nuestras oraciones.
5.- Y finalmente tenemos nuestro dedo pequeño, el más pequeño de todos. El meñique debería recordarte orar por ti mismo. Cuando hayas terminado de orar por los primeros cuatro grupos, tus propias necesidades aparecerán en una perspectiva correcta y estarás preparado para orar por ti de una manera más efectiva.
Ciao.
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2 comentarios:
Pasaba a conocerte, nueva amiga de la blogósfera. Para comenzar, no está mal...me ha encantado tu oración de los cinco dedos. Así no se nos olvida nada. Quería proponerte que al rezar con el dedo anular, pongamos también ahí a la institución de la familia, sombolizada por el anillo. ¡Está tan atacada hoy y es la base de la sociedad!
Un abrazo, encantada de haber llegado hasta tus cosstas en mi navegación
Estoy de acuerdo contigo. Yo creo que todos los dedos son importantes, pero pensé lo mismo que tu, cuando vi que en el dedo "del anillo" no había una oración por la familia.
A partir de ahora, la vamos a incluir ¿OK?
Gracias por tus palabras y tu visita. Que un blog guste y te lo digan, anima a seguir publicando cosas cada día.
Felicidades por el tuyo también. Un saludo. Ciao.
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