viernes, 11 de julio de 2008

No olvides lo principal



Algunas veces la avaricia, hace que nos olvidemos de lo que queremos y de nuestros orígenes. Esta historia, nos pone de manifiesto que la avaricia puede llegar a corrompernos y a matar nuestro corazón.

Cuenta la leyenda que una mujer pobre con un niño en sus brazos pasó delante de una caverna y escuchó una voz misteriosa que desde adentro le decía:
"Entra y toma todo lo que desees, pero NO TE OLVIDES DE LO PRINCIPAL. Debes tener en cuenta que al salir, la puerta se cerrará para siempre. Por lo tanto aprovecha la oportunidad, pero NO TE OLVIDES DE LO PRINCIPAL..."

La mujer entró en la caverna y encontró muchas riquezas. Fascinada por el oro y las joyas, dejó al niño en el piso y comenzó a juntar todo lo que podía.
La voz misteriosa habló nuevamente: “Tienes solo ocho minutos" .
Agotados los ocho minutos, la mujer, cargada de oro y piedras preciosas, corrió hacia fuera de la caverna y la puerta se cerró..... Recordó que el niño había quedado en ese lugar y la puerta estaba cerrada para siempre.

Las riquezas duraron solo 8 minutos. La desesperación y la angustia por siempre.

Lo mismo nos ocurre a nosotros. Tenemos la vida limitada a unos pocos años en este mundo y la voz de Dios siempre nos advierte: “NO TE OLVIDES DE LO PRINCIPAL”.

¿Qué es lo principal? … Los valores espirituales, el amor hacia nuestra familia, nuestros amigos y una vida llena de fe y esperanza.

Esta es la verdadera riqueza, la que se puede guardar en nuestro corazón. No los placeres, el dinero, la fama, el éxito, ni el poder. Todas estas cosas nos distraen de lo que realmente importa, de lo que es esencial: “LOS TESOROS DEL ALMA”.

Cuando la puerta de tu vida se cierra para siempre, de nada valdrán las lamentaciones. Detente y piensa por un momento, ¿Qué es lo principal en tu vida?

“NUNCA LO OLVIDEMOS".

Ciao.


6 comentarios:

CRIS dijo...

Qué historia...sólo pensarla ya me angustia...

Yo una vez escuche algo que cambió mi vida:

"Dios te ama tal y como eres".

Creer esto...abre todas las puertas, por muy cerradas que estén, sobre todo, la de la esperanza.

Leyendo esta historia...aunque no sea real, pienso en la angustia de ambos, madre e hijo...y no puedo dejar de creer que, por muy grandes que sean mis pecados o en la mayor de las adversidades se puede encontrar el Amor de Dios y tener paz. Al menos, esa es mi experiencia.

Hay que creer...y decirle sí...

P. Norberto dijo...

Hola, te invito a visitar mi blog, lo he creado recientemente. Muy bueno el post. Felicidades

lojeda dijo...

Cris, es verdad que la historia, aun sin ser real, es tremenda, porque pone de manifiesto lo avariciosos que podemos a llegar a ser los humanos, y lo pronto que podemos llegar a olvidarnos de los valores esenciales para la vida de la persona.
Una vez más, gracias por estar ahí y darme tu apoyo con tus visitas y comentarios.
Sigo rezando por tu padre y por vosotros. Un abrazo


Norberto, gracias por tus palabras.
Ya he visitado tu blog y me parece un proyecto precioso, y desde aquí
te animo a que lo cuides y sigas en la línea que vas.
Un saludo

alter-ego dijo...

la avaricia sigue su curso,¿cuantas parejas que prefieren,fiestas,vestir bien,salidas,etc y los hijos,estudios y comida lo último.?
Ciertamente,el peor enemigo de la familia es el hábito de la sociedad de consumo.Ya no se crea,ni se conserva,ni se repara:se cambia;nos encontramos en la civilización de "usar y tirar".
Mis saludos cordiales.

Anaroski dijo...

Querida Lourdes:

Las amas de casa, no cotizais a la seguridad social, pero sois la gran base de la familia, haceis de economista, de consultoras sentimentales, de decoradoras, de manitas reparadoras, de diseñadoras de modas, de reposteras, de organizadoras de catering, dais cariño, escuchais, siempre estais ahí, en fin, dais todo a cambio de nada, y gracias a Dios soy hija de una ama de casa, y ojalá yo, pudiera ser una, sería un poco atipica, porque tendría que estar haciendo algo, catequesis, alguna ong,porque soy hiperactivisima, y claro, pero te reconozco, que llegar a casa y recibir un beso de tu madre, tener la comidita preparadita, tener la comprensión de ella el día que estas triste o enfadada eso no tiene precio.

ASI QUE VIVAN LAS AMAS DE CASA, yo creo que tendría que seguir así por mi hiperactividad pero te reconozco que tiene razón la historia del post, DIOS NOS AMA TAL Y COMO SOMOS, Y la grandeza del hombre es ser distintos.

lojeda dijo...

Ana, yo he sido todo lo que tu dices: he sido catequista muchísimos años, he trabajado en una parroquia durante 8 años, haciendo de todo, ahora colaboro con la Delegación de Misiones de Jaén, he sido presidenta del APA del colegio de mis hijos, durante 7 años y otros tantos en el consejo escolar,hice tres años de teología, con sus exámenes, trabajos, etc.
Ahora solo me he quedado con la Delegación y mi casa.
Los años van pesando, y además ahora ya no tengo hijos en edad escolar, pero sigo haciendo cosas. Yo tampoco se estar parada, y el blog me ocupa un tiempo que antes dedicaba a otras cosas.
Un abrazo