Carlos de Foucauld (1858-1916) nace en Estrasburgo en una familia noble. Tras una infancia triste, estudia en el Instituto de Nancy. De naturaleza ardiente, falto de dirección, pierde la fe a los dieciséis años. Al llegar a la mayoría de edad hereda una gran fortuna, que derrocha con su vida licenciosa.
Ingresa en el ejército, y es destinado a la Argelia francesa. Se interesa por los árabes, y tras pedir licencia en el ejército, realiza un viaje por Marruecos disfrazado de rabino judío. Este viaje le ayuda a purificarse, y el desierto y la fe de los musulmanes calientan su fe adormecida. Reza a su modo, y el contacto con su prima Bondy y el Padre Huv elin le ayudan a su conversión. “Tan pronto como creí que había un Dios, me di cuenta que no podía hacer otra cosa que vivir sólo para Él”.
Ingresa en la Trapa, recorre Siria y Tierra Santa, estudia en Roma, y en 1901 se ordena de sacerdote. Le atrae la vida oculta de Jesús en Nazaret. Dedica horas a la oración eucarística, y a la cercanía con los pobres. Hace voto de castidad y pobreza absoluta. El 1 de diciembre de 1916 muere de un disparo en una emboscada.
Este vídeo y esta pequeña biografía nos hablan de otra persona santa, que renunció al lujo y a las comodidades, para dar la vida y evangelizar a los más pobres.
Su oración de Abandono, nos invita a confiar en Dios sobre todas las cosas, y dejarnos en sus manos cuando algo nos preocupe. Él sabrá que hacer con nuestra vida.
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