lunes, 29 de marzo de 2010

Letanías de la humildad




De nuevo tomo prestado un post de algún amigo bloguero, y esta vez (¡Como no!), le ha tocado de nuevo a mi amigo Angelo (Siete de familia).
Estas letanías, me han encantado. Es todo lo que un buen cristiano debe pedir a Dios, para no caer en la vanagloria y el autobombo, y nos puede valer para los momentos de oración en esta semana tan especial para todos los cristianos.
Hagamos nuestra oración diaria estas letanías, y pidamos a Dios humildad y ganas de servir a los hermanos, por su beneficio, y no por el nuestro.
Jesús manso y humilde de corazón, óyeme.

Del deseo de ser estimado, líbrame Jesús.
Del deseo de ser alabado, líbrame Jesús.
Del deseo de ser honrado, líbrame Jesús.
Del deseo de ser aplaudido, líbrame Jesús.
Del deseo de ser preferido a otros, líbrame Jesús.
Del deseo de ser consultado, líbrame Jesús.
Del deseo de ser aceptado, líbrame Jesús.
Del temor de ser humillado, líbrame Jesús.
Del temor de ser despreciado, líbrame Jesús.
Del temor de ser reprendido, líbrame Jesús.
Del temor de ser calumniado, líbrame Jesús.
Del temor de ser olvidado, líbrame Jesús.
Del temor de ser puesto en ridículo, líbrame Jesús.
Del temor de ser injuriado, líbrame Jesús.
Del temor de ser juzgado con malicia, líbrame Jesús.

Que otros sean más estimados que yo, Jesús dame la gracia de desearlo.
Que otros crezcan en la opinión del mundo y yo me eclipse, Jesús dame la gracia de desearlo.
Que otros sean alabados y de mí no se haga caso, Jesús dame la gracia de desearlo.
Que otros sean empleados en cargos y a mí se me juzgue inútil, Jesús dame la gracia de desearlo.
Que otros sean preferidos a mí en todo, Jesús dame la gracia de desearlo.
Que los demás sean más santos que yo con tal que yo sea todo lo santo que pueda, Jesús dame la gracia de desearlo.

ORACIÓN:

Oh Jesús que, siendo Dios, te humillaste hasta la muerte, y muerte de cruz, para ser ejemplo perenne que confunda nuestro orgullo y amor propio. Concédenos la gracia de aprender y practicar tu ejemplo, para que humillándonos como corresponde a nuestra miseria aquí en la tierra, podamos ser ensalzados hasta gozar eternamente de ti en el cielo. Amén.

Ciao.

2 comentarios:

Angelo dijo...

Te aconsejo leer la vida de San Pio X. El cardenal Merry del Val es el autor de esta letanías. La vida de los dos están muy unidas y su amistad y hermandad fue algo excepcional. Merry del Val era español, murio en 1930 y está enterrado en las cripta del vaticano con algunos papas. Disfrutarás con su biografia. Un beso

lojeda dijo...

Buscaré el libro que me recomiendas, porque si tu lo dices, es porque merece la pena y seguiré tu consejo.
Las letanías son preciosas y cuando más as rezo más me gustan.
Un beso