Los derechos del niño 20 de noviembre

Hoy estaremos todos muy ocupados con las elecciones, en las que nos jugamos el futuro de España para estos próximos cuatro años. Pero aún hay más cosas para recordar.

Este vídeo nos vuelve a recordar que hoy, 20 de noviembre se celebra en todo el mundo el Día Universal del Niño.

Aunque los progresos alcanzados en estos últimos años son un motivo de celebración, aún queda mucho por hacer, porque aún, es este mundo globalizado, que presume de progreso y mata y roba por encontrar el bienestar, encontramos a millones de niños, que mueren a diario, por carecer de las cosas más elementales: Una alimentación diaria y una ausencia total de la sanidad, que les cure las enfermedades producidas principalmente por la malnutrición que sufren a diario, si contar los que son sometidos a vejaciones, obligados a trabajar o a la prostitución, abusados y vendidos, por unos padres, que carentes de todos los medios económicos elementales para subsistir ellos y sus hijos, prefieren cometer esta clase de atrocidades, para salir de esa penuria a la que están sometidos.

Días como el 20 de noviembre sirven para recordar que los derechos de la infancia están ratificados pero no garantizados.

El Día Universal de la Infancia es una oportunidad para celebrar que los derechos de todos los niños y niñas son reconocidos mundialmente, pero sobre todo para alzar la voz y protestar a los estamentos oficiales y gobiernos de todo el mundo, para que de una vez por todas, hagan cumplir estos derechos.

Es también un momento para reflexionar sobre cómo lograr un cumplimiento más efectivo de estos derechos.

Estos son los Derechos de los Niños... que se cumplan es responsabilidad de los adultos. Todos y cada uno de nosotros tenemos una función que desempeñar para asegurar que todos los niños y niñas disfruten de su infancia.

Tenemos la responsabilidad de gritar mil veces, para que de una vez por todas, estos seres inocentes, puedan vivir conforme a lo que la Ley les otorga. Una infancia feliz, una educación responsable, y una sanidad que los atienda en los momentos de enfermedad, además de otros muchos, para ofrecerle una vida en libertad y amor.

¿Nos vamos a quedar sentados? ¡Actúemos y denunciemos!

Ciao.