domingo, 17 de noviembre de 2019

Pedir - Agradecer


La capacidad de pedir viene muy aparejada a la experiencia de recepción que hayamos tenido.
Si nunca nos hemos sentido regalados por nadie, no vamos a poder reconocer nunca el significado de un regalo.
Si nunca hemos sentido que podíamos contar con alguien, nos va a costar reconocer los límites de nuestra autosuficiencia.
Sin embargo, sería muy raro que esta fuera toda nuestra experiencia del mundo.
Generalmente, si creemos que en la vida nadie nos ha regalado nada, es porque no hemos estado atentos. Por eso, es importante que le dediquemos algún tiempo de nuestra oración para reconocer las cosas buenas que hay en nuestra vida y los regalos que hemos recibido de Dios y de os demás.
Que algunas, es cierto, serán fruto de nuestro esfuerzo, pero otras muchas, en cambio descubriremos son puro regalo de Dios. Incluso en aquellas que sabemos que hemos trabajado para conseguirlas, podemos mirar hacia atrás y pensar "no sé qué hice para poder conseguir esto". 
Es ahí en donde descubrimos la gracia que Dios nos regala.
¿Te ha pasado alguna vez algo así? 

Hoy os invito a hacer este ejercicio y luego, a pedir con confianza aquello que desees o necesites, sin olvidarte de agradecer a Dios todos los regalos que te da cada día.

Ciao.

No hay comentarios: