viernes, 25 de junio de 2021

Echar la vista atrás


Echar la vista atrás no tiene demasiada buena fama entre nosotros los cristianos. En el famoso pasaje del arado, Jesús dice que quien se gire no sirve para el Reino de Dios.
San Pablo, por su parte, se olvida de lo que queda atrás y se lanza hacia la meta. Y sin embargo somos, en gran parte, el resultado de nuestro pasado.
De algún modo estamos continuamente elaborándolo. A lo mejor lo que quería decir Jesús es que la melancolía y el recrearse en el sentimiento de pérdida no nos ayuda a vivir y trabajar. Y seguramente San Pablo lo que pretendía era animarnos a mirar siempre hacia el Señor, que es siempre el horizonte.
Para arar y correr no ayuda demasiado mirar atrás, es cierto.
Pero hay veces en que la mirada al pasado no procede de un movimiento nuestro, ni de una memoria que se resiste a olvidar el dolor o el daño, recordando lo que no queremos.
En ocasiones, si le dejamos el mando a Dios, Él nos lleva a volver sobre el pasado para ver lo que éramos hace un tiempo, unos meses, años quizá, y ver que se ha producido un cambio. Por pequeño que sea, a lo mejor solo de un palmo. Pero es un palmo lleno de Dios y de agradecimiento, que, esta vez sí, nos ayuda a arar y a lanzarnos hacia la meta.

Espiritualidad Ignaciana

Ciao.

No hay comentarios: