viernes, 12 de marzo de 2010

Conseguir nuestros objetivos


¿Qué nos impide muchas veces conseguir los objetivos que nos marcamos?
Son muchos y variados, y hay infinidad de circunstancias que influyen para que muchas veces nos quedemos a la mitad del camino, pero hay unos puntos en común, que la mayoría de las veces influyen en nosotros para que nos consigamos alcanzar nuestra meta.
Estos son algunos de los obstáculos que nos encontramos y nos impiden conseguir los sueños que nos hemos trazado y que tendríamos que intentar corregir:

1) Falta de valentía para emprender nuevos proyectos.
El miedo a lo desconocido es algo muy común entre las personas. Todos intentamos acomodarnos a las exigencias de la vida. Empezar un nuevo proyecto requiere de mucho esfuerzo, lo que hace que mucha gente se eche para atrás.
Una de las cosas que nos debe enseñar la vida es que, hay que ser valiente, no temer a nada, enfrentarnos a los problemas con la verdad por delante y la cara bien alta.
Pensemos en que después de la tormenta siempre viene la calma.

2) La pereza para mantener la motivación bien alta es necesario realizar un trabajo previo antes de ponerse a trabajar.
Recordemos qué es lo que vamos a lograr con nuestro esfuerzo diario. Pensemos en la recompensa que nos espera al final del camino, pero debemos ir paso a paso, y no queramos andar todo el camino de un sólo salto. Todo este trabajo mental lo debemos de repetir todos los días. Notaremos cómo la pereza desaparece.

3) La rutina para conseguir nuestro objetivo debe de ser constante y nos esforzaremos a diario con el plan que hayamos establecido.
Ese esfuerzo diario puede minar nuestra motivación. Se convierte en rutina pero pensemos que todos los hombres de éxito en su día tuvieron que esforzarse durante años para llegar a donde han llegado. Perseveremos y venceremos, la rutina se convertirá en nuestro éxito.

4) El aburrimiento o la falta de estímulos atractivos hace que nuestra motivación baje hasta los suelos.

Intentemos hacer más amena tu labor diaria.
Busquemos pequeños huecos de tiempo en nuestro trabajo para recompensarnos por lo bien que lo estamos haciendo.

5) La falta de perseverancia y la constancia es la clave.

El éxito no se logra de la noche al día. Requiere un esfuerzo continuado.

Que nadie ni nada se interponga entre una tarea difícil y nosotros, que nadie nos niegue esa espléndida oportunidad para cobrar fuerza, maestría y merecer el éxito.

Ciao.

2 comentarios:

Guerrera de la LUZ dijo...

Hola preciosa, tenía ganas de encontrar un rato para pasarme a verte.

Muy bueno el post. Pienso que con el esfuerzo necesario y la motivación adecuada todo el mundo es capaz de conseguir lo que se proponga.

Y con fortaleza. Ya lo dijo Julio César: "Nada es tan difícil que no pueda conseguir la fortaleza".

Un abrazo, te agrego para visitarte más, que te perdí por el camino.

lojeda dijo...

Gracias Guerrera guapa por tus palabras.
Ya sabes donde estoy y serás siempre bien recibida.
Un besote