lunes, 29 de agosto de 2011

Testamento vital de la Conferencia Episcopal española




Estos últimos días están saltando a la palestras noticias de eutanasias aplicadas en Andalucía y en Madrid. Han dado el pistoletazo de salida, para abrirle la puerta a la muerte discriminada, y vender bajo el nombre de Ley de Muerte Digna, lo que es un asesinato con todas las de la ley.
Estas dos muertes asistidas, han sido el comienzo, y seguro que cada día, escucharemos y veremos en la prensa muchos más casos de personas, que bien porque los familiares quieren "que deje de sufrir" o porque han dado con algún médico que "les aconseja desconectar la máquina que los sostiene", acaban con unas vidas sin el mayor de los escrúpulos.
La Conferencia Episcopal Española, propone en su página web, este modelo de Testamento Vital, por si alguno quiere copiarlo, para tenerlo en el momento de enfermedad.



Testamento vital:

A mi familia, a mi médico, a mi sacerdote, a mi notario:

Si me llega el momento en que no pueda expresar mi voluntad acerca de los tratamientos médicos que se me vayan a aplicar, deseo y pido que esta declaración sea considerada como expresión formal de mi voluntad, asumida de forma consciente, responsable y libre, y que sea respetada como si se tratara de un testamento.

Considero que la vida en este mundo es un don y una bendición de Dios, pero no es el valor supremo y absoluto. Sé que la muerte es inevitable y pone fin a mi existencia terrena, pero creo que me abre el camino a la vida que no se acaba, junto a Dios.

Por ello, yo, el que suscribe, pido que si por mi enfermedad llegara a estar en situación crítica irrecuperable, no se me mantenga en vida por medio de tratamientos desproporcionados; que no se me aplique la eutanasia (ningún acto u omisión que por su naturaleza y en su intención me cause la muerte) y que se me administren los tratamientos adecuados para paliar los sufrimientos.

Pido igualmente ayuda para asumir cristiana y humanamente mi propia muerte. Deseo poder prepararme para este acontecimiento en paz, con la compañía de mis seres queridos y el consuelo de mi fe cristiana, también por medio de los sacramentos.

Suscribo esta declaración después de una madura reflexión. Y pido que los que tengáis que cuidarme respetéis mi voluntad. Designo para velar por el cumplimiento de esta voluntad, cuando yo mismo no pueda hacerlo, a..........................

Faculto a esta misma persona para que, en este supuesto, pueda tomar en mi nombre, las decisiones pertinentes. Para atenuaros cualquier posible sentimiento de culpa, he redactado y firmo esta declaración.



Nombre y apellidos:

Firma:

Lugar y fecha:


Ciao.

2 comentarios:

ARCENDO dijo...

Genial, te agradezco mucho que nos la compartas. Con tu permiso, la enlazaré en mi blog, un dia de estos.

Off topic. Gracias al facebook, que es un chivato, sé que muy prontito es tu cumple. Aprovecho para felicitarte ahora, por si se me pasa luego. Te deseo que cumplas muchos más con salud y en compañia de los tuyos y me acordaré de tí, ese día en mis oraciones...
Y.. una cosa más, se me podrá pasar felicitarte aquí o en el fb, pero no rezar por tí, porque (oh casualidades de la vida) cumples años, el mismito día que mi hija. ABRAZOS ENORMES.

lojeda dijo...

Gracias amigo por tus palabras y por tu recuerdo.
Son mucho más importantes las oraciones, que una felicitación, te lo agradezco de corazón.
Un beso grande