En la vida es mejor andar ligero de equipaje y cargado de afectos. Una reflexión válida para todos.
Cuántas cosas vamos acumulando en la vida. Memorias, proyectos, historias, objetos, actitudes… Está bien, ¿No?
Es señal de vivir, de no quedarte con los brazos cruzados. Pero en parte ocurre como con el armario o las estanterías de la propia habitación.
Que como no despejes de vez en cuando terminas sepultado por libros, ropas, objetos varios… Así que, aunque cueste, de vez en cuando toca hacer limpieza general y tirar por la ventana (metafóricamente) todo lo que sobra. Para quedarse con lo importante.
Pastoral SJ
No hay comentarios:
Publicar un comentario