Dios, porque caigo a menudo en la impaciencia dame fe para seguir esperando lo que mis ojos quisieran ver antes que después.
Dios, si Tú quieres, confíame un poco de tu espíritu para que, las fisuras que se abren a mi paso, gocen de mi perdón y reconciliación con todos.
Ayúdame, oh Dios, a esperar aunque desespere a mirar hacia lo alto, aunque me tiren de abajo a comprender aún a riesgo de ser tenido por loco a rezar, aunque me digan que soy un iluso.
Oh, Señor, regálame un poco de tu fuerza porque, frecuentemente, me siento asaetado empujado al abandono y a dejar de llamar a tu puerta.
Oh, Señor, si yo te pido algo que no me conviene hazme ver que, no es que no me das, sino que me das aquello que menos infeliz me puede hacer.
Hazme entender que no es bueno sembrar con tormenta y que, al dejar el grano, he de hacerlo con cariño, tiento y paciencia.
Oh, Señor, pon en mis labios palabras oportunas para que, lejos de engañarte, digan lo que mi corazón cobija y mi mente piensa.
Para que, lejos de acercarme a Ti con rodeos sea como el agua transparente que se desliza rápidamente por los manantiales.
Oh, Señor, que sepa sentirte, amarte, servirte, rezarte y alabarte como tu nombre requiere y merece
Amén
Javier Leoz Ventura
Ciao.
No hay comentarios:
Publicar un comentario